La llegada de un nuevo miembro peludo siempre es motivo de alegría y celebración, especialmente cuando hablamos de un lugar tan especial como Vinya els Vilars, donde los perros son parte fundamental de la experiencia y del alma de la bodega. 

Bienvenida, Vinya: ¡La más joven de la familia!

Con apenas unas semanas de edad, Vinya ya se ha convertido en el centro de atención de todos nuestros visitantes. Con su energía incansable, su simpatía innata y ese brillo especial en los ojos que solo los cachorros tienen, esta pequeña ya está conquistando corazones. Y no es para menos: en Vinya els Vilars, siempre hemos creído que los perros son mucho más que simples compañeros, son embajadores de nuestra esencia.

Al igual que nuestra querida Turiga, que un poco más crecidita, ha sido una excelente anfitriona, Vinya estará siempre al lado de nuestros visitantes, lista para recibirlos con una cola que no deja de moverse y un carácter juguetón que sin duda será la delicia de grandes y pequeños. Además, estamos convencidos de que Turiga, aunque en algún momento se muestra un poco celosa con la llegada de este “peluchín”, tomará a la pequeña bajo su ala (o más bien, bajo su pata) y le enseñará todos los secretos para ser una gran embajadora canina de nuestra bodega.

¡Un regalo muy especial!

Vinya llega como un regalo lleno de amor para María José Pérez, copropietaria de la bodega, con motivo de la celebración de sus fantàsticos 50 años haces unos días. Un gesto lleno de significado, que refuerza el vínculo entre la bodega, los perros y quienes la conforman.

Para quienes conocéis a María José, sabéis lo importante que son los animales en su vida y cómo han sido una parte esencial de Vinya els Vilars desde el principio. Por eso, para celebrar este importante hito en su vida, no podía haber un mejor obsequio que esta pequeña Golden Retriever, que desde el primer día se ha convertido en su compañera inseparable.

Un recuerdo especial para Shyrah

No podemos dejar de mencionar a nuestra querida Shyrah, quien fue durante tantos años una parte indispensable de nuestra bodega y de la familia que hemos formado en Vinya els Vilars. Su partida nos dejó un vacío enorme, pero también innumerables recuerdos llenos de cariño, diversión y lealtad. Shyrah supo ganarse el corazón de todos los que nos visitaron, y aunque ya no está con nosotros físicamente, su espíritu sigue presente en cada rincón del celler.

Los perros en Vinya els Vilars: Parte de nuestro ADN

Si hay algo que nos distingue como bodega es nuestro compromiso por ofrecer una experiencia única a quienes nos visitan. Y en esa experiencia, nuestros perros juegan un papel fundamental. Ya sea acompañando a los visitantes durante los paseos por los viñedos o siendo cómplices en las catas al aire libre, su presencia siempre aporta un toque de calidez y autenticidad que nos encanta compartir.

Por eso, la llegada de Vinya no solo simboliza una nueva etapa para nuestra pequeña gran familia, sino que también refuerza nuestro compromiso de seguir siendo un lugar acogedor, donde tanto las personas como los animales encuentran un espacio para disfrutar y ser felices. Estamos seguros de que Vinya crecerá rodeada de buenos momentos, buenos vinos y, por supuesto, de mucho cariño de parte de todos nosotros y de quienes nos visiten.

Os invitamos a todos a venir y conocer a nuestra nueva amiga. ¡Estamos deseando que forméis parte de esta historia que recién comienza!

Vinya elsVilars, enoturismo activo, compromiso con el desarrollo del territorio